1) Detección y diagnóstico tempranos de la enfermedad de Alzheimer (EA): La detección de biomarcadores en sangre periférica permite identificar los cambios patológicos correspondientes antes de que se manifiesten los síntomas clínicos, lo que facilita la detección temprana de la EA y brinda la oportunidad de una intervención oportuna.
2) Evaluación relacionada con el tratamiento de la EA: Tras la terapia farmacológica dirigida u otros tratamientos relacionados, la detección combinada de biomarcadores en sangre periférica permite un seguimiento dinámico de la eficacia y el pronóstico del tratamiento en pacientes con EA.
3) Atención primaria de salud: En combinación con los chequeos médicos, las personas mayores pueden someterse a una evaluación anual regular y recibir una intervención temprana.